Un habitante de la zona rural de Buenaventura encontró los cadáveres de un hombre y su hijo en una fosa común.

El ciudadano avisó a las autoridades y las víctimas fueron identificadas como Javier Mauricio Palomino y su hijo Juan Fernando Palomino.

Ambos fueron secuestrados en junio de 2021, por integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

También había sido retenido otro familiar, pero fue liberado para después exigir la suma de $100 millones por los otros dos secuestrados.

Sin embargo, el padre y su hijo fueron asesinados.

Tenían una empresa que atendía a turistas en el corregimiento de Sabaletas.